Estoy en una terraza, en algún edificio de una ciudad. Frente a mí el sol se esconde tras el horizonte urbano, esa línea irregular de azoteas, antenas, lazos, tinacos y otros elementos que impiden que vea el natural, con los cerros y sus árboles, lejos, muy atrás.
El cielo es anaranjado con rosa y violeta. Una chica de estatura corta, cabello largo, castaño (que por cierto adquiere tonalidades extrañas con el cambio de luz), rasgos finos y cuerpo esbelto, toma mi mano y con la otra me extiende un martini dulzón.
Ella no bebe. Yo lo disfruto. La brisa citadina nos refresca. Estamos solos. De fondo, Marsheaux.
Marsheaux - Hanging On
No hay comentarios:
Publicar un comentario